Un cuidadoso examen de sí mismo
Aunque a menudo se puede conseguir ayuda mediante tratamiento profesional, por lo general la solución no viene “de golpe.” Es imprescindible que la persona deprimida dedique tiempo a hacer un examen honrado de sí misma.
Una señora deprimida de 35 años de edad descubrió con el tiempo, que para hallar alivio duradero tuvo que hacer varios ajustes, además de aquellos relacionados con sus hábitos de comer. Ella lo explica así: “Los medicamentos no le resuelven todos sus problemas. Uno tiene que reconocer sus temores y angustias y enfrentarse a éstos y cambiar su modo de pensar.”
Sí, todo método terapéutico tiene sus límites.
Ninguno de ellos de sí mismo puede hacer de usted una persona nueva. Los medicamentos y las vitaminas pueden nivelar su disposición de ánimo, pero no pueden poner en orden su vida familiar.
“Si usted exige una realización ‘perfecta’ en su lugar de empleo, amigos ajustándolos precisamente a "su modelo" también muchas posesiones materiales costosas, (según advierte el perito DiMele) puede que usted esté preparándose el camino para períodos de depresión durante toda la vida.”
Se ve, pues, que aunque hay una variedad de métodos profesionales de atender la depresión grave, nunca debe olvidarse que en el caso de todos ellos es preciso que el deprimido los acompañe con un esfuerzo resuelto. Solo así es posible vencer la depresión grave.
Los trastornos mentales son muy complejos y cada paciente es diferente. Por eso, el médico que esté familiarizado con el paciente generalmente puede recomendar qué método de tratamiento es mejor.
Un grupo de científicos alistan B1, B3 (niacina), B6, B12, ácido pantoténico, biotina, ácido fólico y C en Nutrition and the Brain (1979, corregido por Wortman y Wortman del Instituto de Tecnología de Massachusetts).
Hay una interacción estrecha entre la mente y el cuerpo. Nuestros pensamientos pueden afectar al cuerpo y pueden producir en el cerebro un desequilibrio químico que resulte en depresión. También el cuerpo, a causa de deficiencias, enfermedad o defectos físicos, puede afectar a la mente y contribuir a la depresión
Aunque a menudo se puede conseguir ayuda mediante tratamiento profesional, por lo general la solución no viene “de golpe.” Es imprescindible que la persona deprimida dedique tiempo a hacer un examen honrado de sí misma.
Una señora deprimida de 35 años de edad descubrió con el tiempo, que para hallar alivio duradero tuvo que hacer varios ajustes, además de aquellos relacionados con sus hábitos de comer. Ella lo explica así: “Los medicamentos no le resuelven todos sus problemas. Uno tiene que reconocer sus temores y angustias y enfrentarse a éstos y cambiar su modo de pensar.”
Sí, todo método terapéutico tiene sus límites.
Ninguno de ellos de sí mismo puede hacer de usted una persona nueva. Los medicamentos y las vitaminas pueden nivelar su disposición de ánimo, pero no pueden poner en orden su vida familiar.
“Si usted exige una realización ‘perfecta’ en su lugar de empleo, amigos ajustándolos precisamente a "su modelo" también muchas posesiones materiales costosas, (según advierte el perito DiMele) puede que usted esté preparándose el camino para períodos de depresión durante toda la vida.”
Se ve, pues, que aunque hay una variedad de métodos profesionales de atender la depresión grave, nunca debe olvidarse que en el caso de todos ellos es preciso que el deprimido los acompañe con un esfuerzo resuelto. Solo así es posible vencer la depresión grave.
Los trastornos mentales son muy complejos y cada paciente es diferente. Por eso, el médico que esté familiarizado con el paciente generalmente puede recomendar qué método de tratamiento es mejor.
Un grupo de científicos alistan B1, B3 (niacina), B6, B12, ácido pantoténico, biotina, ácido fólico y C en Nutrition and the Brain (1979, corregido por Wortman y Wortman del Instituto de Tecnología de Massachusetts).
Hay una interacción estrecha entre la mente y el cuerpo. Nuestros pensamientos pueden afectar al cuerpo y pueden producir en el cerebro un desequilibrio químico que resulte en depresión. También el cuerpo, a causa de deficiencias, enfermedad o defectos físicos, puede afectar a la mente y contribuir a la depresión
No hay comentarios:
Publicar un comentario